Hoy me gustaría hablaros de la Luna. No sé porque, pero me atrae soñar despierto. La Luna ha maravillado y también aterrorizado a la humanidad en todas sus épocas y ha sido objeto de innumerables historias y leyendas.
Durante siglos al igual que se pensaba que la tierra era plana, la gente creía que la Luna afectaba el comportamiento humano.
De hecho, la palabra "lunático", sirve para referirnos a una persona que padece cierta locura por intervalos.
“Tanto el filósofo griego Aristóteles como el naturalista romano Plinio el Viejo creían que la locura y la epilepsia eran causadas por el satélite natural de la Tierra”.
También se suele decir en nuestra sociedad, que la fase de Luna llena acelera el parto, pero no hay evidencia científica de ello. No es la primera vez que oímos que las embarazadas tienen más probabilidades de parir en una Luna llena, aunque las evidencias científicas sobre nacimientos en las diferentes fases lunares sean inconsistentes y no sean comprobados científicamente, todo se debe al saber popular.
Lo mismo ocurre con la evidencia, en otra leyenda, de que el ciclo lunar aumenta la violencia entre los reclusos, aunque un estudio reciente sugirió que la actividad delictiva al aire libre (incidentes que ocurren en las calles o en entornos naturales como las playas) puede ser mayor cuando hay más luz de la Luna, más que nada por la importancia de la visión nocturna del entorno
Sobre el sueño sí existe evidencia de que varía a lo largo del ciclo lunar.
Por ejemplo, “un estudio de 2013 realizado bajo las condiciones altamente controladas de un laboratorio de sueño descubrió que en promedio las personas tardaron cinco minutos más en quedarse dormidas y durmieron durante 20 minutos menos en Luna llena, en comparación con el resto del tiempo del mes, a pesar de que no estuvieron expuestos a la luz de la Luna”.
A su vez, la medición de su actividad cerebral sugirió que la cantidad de sueño profundo que experimentaron se redujo en un 30%.
También es sabido que, gracias a los ciclos de la Luna, se puede hablar de que afecta a la Tierra de varias maneras. La primera y más evidente es a través de la provisión de luz.
La fase de Luna llena sucede cada 29 días, mientras que la Luna nueva que le sigue dura 14 días.
Luego está la también comprobada, atracción gravitacional de la Luna, que crea las mareas oceánicas que suben y bajan cada 12 horas.
La altura de esas mareas también sigue ciclos de aproximadamente dos semanas: uno que dura 14 días y es impulsado por la atracción combinada de la Luna y el Sol, y otro de 13 días, que es impulsado por la posición de la Luna en relación con el ecuador de la Tierra.
Por tanto, mareas mas o menos intensas en el mar, dependen de la fase lunar
Ni que decir tiene que también podemos hablar de cierta atracción gravitacional. Esto desencadena fluctuaciones sutiles en el campo magnético de la Tierra, al que algunas personas pueden ser sensibles.
"Los océanos son conductores de electricidad porque están hechos de agua salada y fluyen con las mareas que tienen un campo magnético asociado", dice Robert Wickes, un experto en meteorología espacial del University College of London, Reino Unido.
No obstante, el efecto es pequeño y no está claro si la influencia de la Luna en el campo magnético de la Tierra es lo suficientemente fuerte como para inducir cambios biológicos en las personas
A diferencia de ciertas aves, peces e insectos, en los que si está demostrado, no se considera que los humanos posean un sentido magnético.
Sin embargo, investigadores del Instituto de Tecnología de California, en Estados Unidos., descubrieron que cuando las personas estaban expuestas a cambios en el campo magnético, equivalentes a las que experimentamos a medida que nos movemos por nuestro entorno local, experimentaban fuertes disminuciones en la actividad de las ondas alfa del cerebro.
Y también es muy mencionado, las situaciones de “eclipse lunar”, ese momento en el que de forma total o parcial, está oculta la luna a los ojos de las personas
La palabra "eclipse" deriva de una antigua expresión griega que significa "abandono".
Y se piensa que "también tienen cambios bastante dramáticos en el tiempo y la duración de su sueño", las situaciones de eclipse.
Es decir todo nos conduce a ese misterio que supone la relación de la tierra y por ende quienes vivimos en ella, con el astro lunar. Teorías, costumbres, encuentros de culturas, divinidades, muchas leyendas surgieron alrededor de la luna, luego también, porque no, los mediadores, dejando volar nuestra imaginación, podríamos decir: ¿hay algún momento ideal o propicio para que las personas estén más cercanas al acuerdo?
Nuestra realidad es el conflicto, de intereses, de poder, de sentimientos, de realidades y no es de descartar, aunque como todo lo que he contado anteriormente, no haya un criterio científico, que haya “algún momento idóneo” para mediar, para reunirnos en una ceremonia de colaboración.
Quizás sin saberlo, la luna nos ayude a comprender que los “mandamientos indios” que se centran en la naturaleza, están más cercanos para mediar:
- Trata la Tierra y a todo lo que hay en ella con respeto.
- Muestra gran respeto por tu semejante.
- Trabaja junto para el beneficio de toda la Humanidad.
- Da asistencia y cariño donde se necesite.
- Haz lo que creas que está bien.
- Mira después el bienestar del cuerpo y la mente.
- Dedica una parte de tus esfuerzos al bien común.
- Sé sincero y honesto siempre.
- Hazte responsable de tus actos.
Y yo añadiría, deja que la luna te guie en las oscuridades del conflicto, para buscar una salida.
2 comentarios:
"Los beneficios de la Luna". Charles Baudelaire
Me ha encantado
Gracias
excelente Maestro, gracias siempre.!! Un abrazo.!!
Publicar un comentario