El Mediador profesionalizado y su maestro, el ejemplo de "Kung fu Panda"

Escrito por Sumaya Sbai y Javier Alés

“Se es sabido y oído, que todos llevamos un mediador dentro, pero si las personas que deseamos desempeñar esta bella profesión, con amor, pasión y sobre todo “vocación”, considero necesaria, que nos formemos lo mejor posible, es decir, que desempeñemos mediación de CALIDAD.

Recordando la historia de Kung Fu Panda, y su maestro Shifu, una de sus célebres frases fue:

'El ayer es historia, el mañana es un misterio y el hoy es un obsequio, por eso se llama presente'. Quiere decir que debemos vivir siempre el presente. 'Tu mente es como esta agua amigo. Cuando se agita es difícil ver.

Shifu descubre que Po es capaz de realizar hazañas físicas impresionantes cuando está motivado por la comida. Usando la comida como refuerzo positivo, Shifu entrena con éxito a Po incorporando estas hazañas en un estilo innovador de kung fu.

Por ello, entiendo que la calidad de los docentes, es un factor motivador a la hora de que los alumnos que se están formando en Mediación, sean finalmente Mediadores de calidad.

Por ello, me siento tremendamente agradecida, orgullosa y motivada, por los docentes que me están formando, para poder ser una mediadora, en un futuro cercano”.

Con estas palabras Sumaya, me animaba a escribir este post y no sabe que quien tiene que estar agradecido a personas como ella son muchos profesores y profesoras de este bello “arte” de mediar, que cuando preparamos el material de clase, los documentos a compartir o las dinámicas a realizar para aprender a negociar, queremos que cada una de nuestras frases, de nuestras “batallitas” calen hondo en ellos.

Por eso hoy, en referencia a ese “Kung fu Panda” que todos llevamos dentro, resiliente, motivador, generoso, pero ante todo, aprendiz de por vida, me encantaría querido lector/a que tendiéramos la mano a todo aquél que nos necesite.

Nunca debemos de olvidar que esta profesión nace y crece, porque desde el primer momento de los tiempos, es necesario enseñar a quien tiene un problema a gestionarlo solo.

Así nos ocurrió cuando el primer biberón, el primer llanto o la primera pelea por un juguete. Y crecimos, crecimos tanto que hoy somos mediadores querida Sumaya, y no solo vemos el conflicto como una oportunidad, sino que no importa entrar en él, para ayudar a los demás y ser conscientes que solo aprendiendo como hacerlo, nos servirá para educarnos en un futuro, que desconocemos pero que a buen seguro lo que enseñemos en un proceso de mediación, quedará para siempre en las mentes de quienes lo vivieron en primera persona, nuestros mediados.

Hubo un día que fui yo el agradecido, hoy lo eres tú, mañana lo serán otros, pero Shifu siempre existirá entre nosotros.