viernes, 3 de junio de 2022

Las generaciones y su importancia en la mediación

 

Por Zoraida Fernández (Paraguay)

Es seguro querido lector/a que habrás escuchado sobre los nombres y las características de las generaciones pues para recordarlos, haremos referencia a ellas ya que son de suma importancia conocerlos. Aunque no lo sepamos, sin darnos cuenta, todos pertenecemos a una generación debidamente acotada e identificada que puede marcar mucho nuestro día a día o nuestras costumbres.

Habrás escuchado hablar que se han clasificado las generaciones y las características de los mismos según el año de nacimiento, que si bien no son exactos, marcan ciertos rasgos a tener en cuenta de cada uno y que a buen seguro nos pueden invitar a saber cómo negociar entre las partes en conflicto de una generación, o de distintas generaciones llegado el caso. Seguramente nos suenen las generaciones de los niños de la postguerra, del baby boom, los actuales millennials o los más cercanos de la generación “Z”, tan presentes hoy en día en los medios de comunicación y en las conversaciones en cualquier lugar, por sus problemas de acceder a viviendas o a trabajos remunerados.

No olvidemos que, Identificar y establecer límites generacionales es muy útil para los investigadores sociológicos y antropológicos, pero también a quienes debemos trabajar en el ámbito de la negociación, porque tener información sobre un colectivo, y sobre cómo este interactúa o reacciona a los sucesos familiares, económicos, sociales o grupales que suceden a su alrededor es una herramienta muy valiosa, para conseguir que las partes se legitimen y sobre todo, que seamos conscientes de los distintos valores y percepciones sobre el conflicto.

Pues comenzaremos a mencionaros las distintas generaciones, comenzando con los llamados “niños de la postguerra”, son aquellas personas que están actualmente entre los80 y 90 años, que crecieron tras la Guerra Civil española y/o la Segunda Guerra Mundial. Sus problemas se centran al día de hoy y es la conflictividad que llega a nuestras mesas de mediación, en su cuidado al ser en su mayoría ya una generación “dependiente”

Las condiciones de vida que tuvieron durante buena parte de su vida, marcaron su carácter desconfiado y ante el que muestran frases como: “no sabéis la suerte que tenéis de vivir con todas las comodidades”. Son personas muy austeras y trabajadoras que han sido educados en la cultura del esfuerzo y el sacrificio y que han conocido una vida mucho más dura y que a buen seguro van a estar dispuesto a lo que sea, con tal de salir de un problema.

En segundo lugar, hablaríamos de los llamados Baby boomer que son los nacidos entre 1946-1964 es la generación más numerosa gracias al aumento demográfico. Fueron los primeros en vivir en paz y en un período de bonanza tras la postguerra.

Son aquellos que vivieron el éxodo del campo a la ciudad, para mejorar su bienestar y que empezaron a disfrutar de vacaciones o se compraron su primer coche y su primer televisor, como ventana al mundo para romper fronteras.

Actualmente es una generación, caracterizada también por tener que adaptarse a las nuevas tecnologías por lo que son considerados inmigrantes de digitales y tienen impregnada una cultura del esfuerzo y el sacrificio lo que les hace muy constantes a la hora de negociar.

Mediar con personas de esta generación, nos lleva a madurar mucho la solución y sobre todo a que pueda ser estable y duradera, porque el tiempo es un gran valor.

En tercer lugar, de la lista tendríamos la Generación X. Esta es aquella que  se encuentra entre los años 1965 a 1980,

Son los hijos de los baby boomers, los nacidos en los setenta. Vivieron y viven según los países, con la progresiva apertura política de los mismos. Vivieron el esplendor del consumismo y la obsesión por el triunfo a toda costa. También conocidos como la generación de la EGB por ejemplo en España, fueron los primeros en familiarizarse con los ordenadores como herramienta de trabajo y es considerada la generación puente, ya que es una etapa en donde se arraigó muy fuerte el capitalismo y experimentó el auge del bienestar, por lo que se dice que son ambiciosos. Ello marcará la mesa de negociación ya que les es difícil ceder y conceder. Quieren sobre todo “conseguir”, con percepciones muy negativas, son conscientes que el acuerdo llegará, pero que no va a ser fácil y más si la parte contraria es de otra generación, que no entiende que los tiempos han cambiado.

La siguiente es una generación sería la Generación de los Millennials. Aquí se encuentran los nacidos entre 1981 a 1995, son los nativos digitales, la primera generación que es realmente global por compartir los mismos valores en todos los países gracias a la globalización y a la conexión de internet. Seguramente la generación más conocida y criticada. Los Millennials son aquellas personas, en las que piensan que todos los jóvenes occidentales pueden identificarse con los mismos valores.

A esta generación le gusta aprender y emprender, vivieron la crisis del 2008 por lo que se consideran tolerantes a las frustraciones, autoconfianza y mucho compromiso, pero no le asusta cambiar de trabajo, se adaptan a las novedades y no ven una vida sin tecnología. Son y serán los primeros que en buena medida les interesa las reuniones on-line, porque así han crecido y tienen en nuestro ámbito de mediación, muy claro, que el tiempo es oro. Tras la Pandemia, han sido conscientes de lo que tienen y de lo que podrías perder, por lo que junto a la salud, las relaciones sociales, para ellos, lo más importante es que la salida a un problema se convierta en un “scape room”. Realmente no le tienen miedo a dar su brazo a torcer, porque aunque han sido conocidos también como ‘ninis’, es una generación estigmatizada que ha sido descrita como perezosa, individualista, aburguesada… pero también son estos jóvenes los que impulsaron la vida sana, la alimentación saludable o el ecologismo, valores muy olvidados que crean grupo y respeto

Y así llegamos por último a la generación de los Centennials o generación Z está va entre los años 1997 al 2010, son los más jóvenes en el mercado laboral, viven inmerso en la sociedad de internet, Consumen todo en formato digitales, estudian y leen on line, autodidactas,,. están en la vanguardia en las redes sociales. Son muy flexibles y realizan multitareas ya que prefieren el trabajo a distancia, con gran espíritu innovador y pragmático, son personas que no son fáciles de fidelizar. Son jóvenes muy creativos, con una alta adaptabilidad a nuevos entornos. Saben que tendrán que adaptarse muchas veces a nuevas realidades laborales y tener mucha movilidad geográfica en un mundo cada vez más global. Los resultados inmediatos y el inconformismo, pueden marcar su relación con el conflicto, algo que tenemos que tener muy en cuenta.

¿Pero hay más? Ya se habla y hay varias opiniones, sobre si se puede abrir una nueva generación y cuándo empezaría: es la generación a la que expertos llaman Alfa. Y es Alfa porque con la generación Z se ha terminado el alfabeto latino y comienza el griego.

El debate está sobre si esta generación empezaría o no en 2010 por ejemplo y una de sus características sería vivir a través de una pantalla o, dicho de una forma más visual, nacer con un Ipad bajo el brazo. No es lejano hablar de ella, porque los mediadores sabemos que sobre todo en conflictos familiares, tenemos que permitir que los actuales niños tengan su parte de opinión.

Como habéis visto, tenemos un abanico de características y factores con los que nacieron, crecieron y se desarrollaron las personas que componen nuestras sociedades y cómo debemos atender nuestros servicios de mediación considerando estos factores generacionales que tienen distintas prioridades, necesidades y un nivel de exigencias y urgencias en solucionar sus conflictos.

Eso nos pone a los mediadores a prueba de saber reconocer las necesidades y la manera de encarar a las distintas personas que vienen buscando nuestros servicios y cómo hacer que ello sean lo más eficientes posibles. Conocer de que generación es y si se mezclan generaciones en el problema, nos pone en escenarios muy distintos.

Cada mediador tiene su propio desafío donde quiera que se encuentre, lo importante es que no importa en que parte del planeta estes, sepas emplear todas aquellas técnicas que como buen mediador has aprendido y que uses tu ingenio camaleónico para poder lograr con éxito un buen proceso de mediación.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias Maestro, muy interesante pensar en las generaciones, abrazo!

Mary De Simone dijo...

Excelente querido Maestro y Zoraida Fernández Jove.!!! Gracias a ambos, un abrazo.!!!!

Anónimo dijo...

Gracias Querido Maestro por transmitir entusiasmo y amor por la Medicación. Bendiciones!

Anónimo dijo...

Excelente lo compartiré con grupo de mediación de mí consejo profesional

Anónimo dijo...

Excelente. Buen trabajo y muy util